a la conquista de Euskadi

Nueve años, y un día, El Rey decidió por fin acudir a una final del Torneo de Baloncesto homónimo, en Euskadi, para patentizarles el afecto de la Corona.
Al ingresar en el recinto deportivo, la real pareja fué objeto de un cariñoso recibimiento por parte de las aficiones vasca y catalana que supieron valorar y agradecer el gesto del Rey. En correspondencia, se redujo la interpretación del Himno español a unos pocos acordes por espacio de breves segundos.

Les acompañaba en la Presidencia, como es de rigor, el Lehendakari del PSOE y PP, empeñado en lograr la celebración de partidos de futbol de la 'roja' en la 'región' que preside.

También acudió al evento Florentino Pérez con la sana intención de comenzar a recoger los primeros frutos de su proyecto, también espectacular para la sección de baloncesto del club que preside, animado por la exhibición de su equipo el día anterior frente al Caja Laboral de Victoria.

Todo el mundo quedó satisfecho con el espectáculo. Alguno no tanto.

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